No por ser la ultima semana del año la Fuente ha perdido su esencia ni su fuerza. Ha sido una bendición a los de dentro y los de fuera y nos ha cuidado el corazón con las experiencias vividas por los peregrinos exhaustos pero cercanos que han encontrado entre nosotros el calor del abrazo del Padre. Hasta el año que viene!
martes, 6 de septiembre de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario